En pleno corazón de la Costa del Sol occidental encontramos esta localidad, turística donde las halla. Está protegida por la Sierra Blanca y cuenta con más de veinte kilómetros de costa, donde abundan urbanizaciones de calidad y numerosos complejos hoteleros. A pesar de estas manifestaciones de modernidad y desarrollo, en Marbella todavía quedan vestigios arquitectónicos de su época árabe y de su posterior período cristiano, del que proviene la costumbre de las hornacinas de santos que pueblan la ciudad y que tenían como misión sacralizar el lugar anteriormente ocupado por los árabes.
Es una ciudad perfectamente comunicada, tanto por carretera (Granada, Córdoba, Cádiz y Sevilla están aproximadamente a 1 horas por autovía) como por avión, con el Aeropuerto de Málaga a tan solo 1 hora de Marbella o por barco, desde sus prestigiosos puertos deportivos.